Bryan Hernández y su legendaria vocación por informar
El periodismo lo lleva en la sangre, en el alma y en el corazón; para Bryan Hernández informar más que un trabajo es un legado, una herencia del mejor de los maestros, su padre.
Francisco Hernández Umanzor, es el nombre del comunicador que además de guiar sus pasos como progenitor, le marcó el camino de un periodismo acucioso y profesional.
Sus inicios se remontan al 2008, cuando incursionó en el programa noticioso de Canal 51; descubriendo el sentido de investigar, informar y servir a la población.
A pesar de tener experiencia en distintas ramas del periodismo, como relaciones públicas, prensa escrita y televisión; su pasión es la radio.
“Crecí con esa admiración y esa imagen de mi padre (Francisco Hernández Umanzor) con esa potente voz de Radio América… Y dije desde pequeño: Yo voy a ser periodista y voy hacer uno de los mejores”, recordó con nostalgia.
Al ahondar en detalles sobre las diferencias entre el periodismo de hace 20 años y el actual, fue contundente al decir que “al periodista no le gusta investigar, se perdió la motivación del periodismo de investigación”.
Al respecto enfatizó que el auge del internet, los abusos de los gobiernos y un “periodismo light” se han adueñado del gremio.
Sobre la imparcialidad y objetividad de los comunicadores, hizo énfasis en que un profesional que hace vínculos de amistad con funcionarios o políticos llega a comprometerse y hasta distorsionar su trayectoria.
Bryan Hernández, tiene claro que el periodismo es la carrera más hermosa, pero también una de las más menospreciadas con salarios bajos y largas horas laborales.
CALIDAD VRS MORBO
Cuando se le preguntó por la calidad del contenido y de los medios de comunicación hondureños, responsabilizó al Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) y a los propietarios de las cadenas televisivas, radiales y periódicos de instar a la "payasada y al morbo".
Para el comunicador la “chabacanada” se ha adueñado hasta de los programas noticiosos, todo por el afán de ganar raiting; enajenando las mentes de los ciudadanos.
“Los mismos medios de comunicación se prestan a la chabacanada por un apetito y delictivo deseo de generar ingresos con chabacanadas que es lo que gusta a la población”.
Hernández, actualmente decidió emprender un negocio de taxi VIP, ofreciendo tarifas cómodas y un servicio de calidad como está acostumbrado a hacer todo lo que emprende, una de las enseñanzas de su padre.
Mi Taxi VIP, es uno de esos proyectos que naciò del anhelo de salir adelante y así aportar al país económicamente, a través de la generación de empleo.