Junnior Rodríguez: El cazador de historias que plasma un recuerdo perpetuo
Su amor por lo eterno y la pasión por la esencia que marca una historia más allá de la muerte, se han plasmado en el trabajo de Junnior Rodríguez; y es que el joven hace de cada fotografía el recuerdo perpetuo que pasará de generación en generación.
Para el especialista en audio y apasionado por lo visual, una fotografía representa una emoción, un sentir que en un futuro será narrado por sus protagonistas.
Su encanto por plasmar momentos lo descubrió a sus 15 años, su cercanía con personas ligadas a los medios de comunicación le despertaron su pasión por las cámaras.
“El gusto por la fotografía inició cuando tenía 15 años, porque en mi iglesia habían personas que estudiaban comunicaciones y poco a poco me fue gustando”, relató.
La creatividad, el esfuerzo, el interés de aprender cada día, una cámara y una computadora, son los instrumentos de su trabajo, el cual disfruta sin mesura.
“Mi primera sesión fue la de un embarazo donde está mi mejor amigo, Junior Moreira, y su esposa, Jimena Baires; cuando subí las fotografías a la gente le gustó tanto que se me abrieron las puertas”, agregó.
Al consultarle sobre la clave de la felicidad y el éxito de su trabajo detalló que todo pasa por satisfacer el gusto de la clientela, quienes lo van recomendando y paso a paso logrando su sueño.
“Es satisfactorio saber que un día las personas a las que le he cubierto bodas contarán una historia con cada fotografía… Me satisface saber que detrás de cada historia hubo alguien quien la dejó plasmada en una imagen, y ese alguien soy yo”.
Además, de amar lo visual y el audio, en sus tiempos libres se dedica a leer, escribir y escuchar música.
Pero uno de sus pasatiempos favoritos es dedicarle a Dios cada segundo y de su vida, agradeciéndole por dos grandes regalos: su novia y hermano, quienes son parte fundamental del camino que va trazando con esfuerzos.