El machismo y la cruel historia de Medusa
El machismo y sus orígenes tiene sello de dioses griegos, existen historias que lo revelan y un ejemplo es el de Medusa, un ser mitológico que vivió la más cruel de las condenas tras ser violada por un ser divino.
Medusa, no siempre fue el mounstro de cabezas de serpiente, con el poder de convertir en estatua a quien miraba; en sus inicios fue una hermosa doncella (virgen), de belleza envidiable que se convirtió en su castigo.
La joven, con un físico inimaginable decidió dedicarse al servicio de la diosa Atenea, a quien respetaba y adoraba con fervor.
Lo injusto de la historia y que refleja el machismo tiene sello de dioses, es el cruel castigo que Atenea le dio a su sacerdotisa, quien después de ser violada por Poseidón fue condenada a vivir en una isla lejana, fea y maldita.
La diosa de la guerra, Atenea, culpó a Medusa por poseer la belleza y justificó la violación indicando que ella había provocado a Poseidón.
La maldición y castigo no solo le impidió a una doncella recuperarse de la mancilla, perder su vida, sino que hizo de Medusa un mounstro con cabezas de serpiente que convertía a sus víctimas en piedra, alejada y odiada por quien ella admiraba.
El pensar de Atenea, no quedó en la historia aún el tabú de culpar a la víctima existe y es una lucha que se ha emprendido por varias organizaciones femeninas.